El sueño es una condición indispensable para un ser humano. De este hecho, los científicos de todo el mundo, no tienen lugar a dudas que es una necesidad básica. Yendo más lejos, el sueño es una condición no optativa para la inmensa mayoría del reino animal. Incluso la creencia de que los peces no duermen, es una verdad a medias, ya que muchos de ellos dejan descansar solo una mitad del cerebro a la vez, para no sumirse en la inconciencia; al igual que el avestruz, a la guardia de los predadores.
Pero, siempre que la regla surge, alguien nace para romperla. Y el hombre que rompe la regla del sueño se llama Ngoc Thai, un vietnamita nacido en 1942.
Según relata el mismo Ngoc Thai, campesino de toda la vida, luego de un ataque de fiebre en 1973, ya no pudo volver a dormir. Su cerebro no descansa, pero a pesar de declarar en el 2007 que se estaba sintiendo “gruñón” por la falta de sueño, 34 años sin dormir no dejan de convertirlo en un asombro, por no decir “milagro” médico.
Así como el personaje de John Travolta en la película “Phenomenon”, el sexagenario oriundo de la comunidad de Que Trung, asegura que el sueño no lo afecta físicamente, y se jacta de poder cargar dos empaques de 50 Kg. cada uno, por el trayecto de 4 kilómetros que lo conduce a su casa cada fin de día. “Aún estoy saludable y puedo realizar las tareas de la granja de forma normal como otros”.
Sin embargo, la habilidad del granjero no es bien recibida por este, a quien no le causa emoción pasar las noches en vela. A pesar de haber recurrido a pastillas para dormir, y las tradicionales recetas vietnamitas, Ngoc Thai no puede pegar un ojo. Ni siquiera el alcohol logra tumbarlo.
La única anomalía que presenta el insomne, es un leve trastorno hepático, el cual puede atribuirse tanto a la falta de sueño, como a muchos otros factores.
La falta de sueño es un tópico central de innumerables libros de medicina, con trastornos bien reconocidos entre los que la padecen. Sin embargo, existen algunos casos de personas en las que muy pocas horas son suficientes para el reposo, tal como los integrantes de la tribu de los Pirahas, en el Amazonas, para los cuales solo una corta siesta sirve como el sueño más reparador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario